OVNIS, OPARS, ARQUEOLOGIA Y LEYENDAS URBANAS

viernes, 29 de marzo de 2013

LA ISLA DE LOS MUERTOS

 
El gobierno de Chile en 1905 cedio la explotación de unos terrenos en Bajo Pisagua,
en la desembocadura del Río Baker. Cedió esta explotación a la Compañía explotadora del Baker, esta a su vez contrató a doscientos obreros chilotes y los embarcó en el vapor Dalcahue, su misión una vez llegaran al lugar era construir barracones, casas, carreteras y corrales. Tendrían 6 meses desde su llegada hasta que volviera otro barco.
El vapor Dalcahue de la empresa de navegación Menéndez Behety sale de puerto y navegara sin contratiempos por zonas de una gran belleza, pero a su vez por ser tan vírgenes, muy peligrosas para la navegación.
El vapor desembarca a los obreros, las herramientas y alimentos. El capataz, un inglés llamado Williams Norris, ordena la construcción de una oficina, corrales, establos, un almacén donde guardar los alimentos y las herramientas, y un barracon donde dormirán y comerán los trabajadores.
Comienza un trabajo duro abriéndose camino derribando enormes árboles, haciendo caminos en el bosque, para crear una carretera que permita llegar hasta la frontera con Argentina, y permita exportar lana y carne en el futuro. 
La empresa que los contrató, la Compañía Explotadora del Baker, les entregó herramientas y una cierta cantidad de alimentos, con la promesa de que enviarían barcos continuamente para aprovisionar el nuevo asentamiento.
Transcurren los meses, la alimentación es a base de carne salada, tocino, arroz, alubias y harina. No hay verduras ni frutas frescas, y los alimentos empiezan a estropearse. Al tercer mes los obreros empezaron a enfermar. Moretones en piernas y brazos, hemorragias que indicaban daños gastrointestinales, sangramiento de encías, mareos, dolores de cabeza y una irritabilidad que hacia que cada día hubiera peleas entre obreros. Todo esto acompañado con dolores musculares que impiden que los trabajadores realicen sus labores. Solo cabía esperar, que pasaran los seis meses para que llegara otra vez el barco y pasaron los meses, y no llegó ningún barco. Los obreros permanecían en las barracas soportando las inclemencias del tiempo, lluvias, fuertes vientos y sobre todo mucho frió. Los trabajos se paralizaron, no podían continuar construyendo una carretera que llegase hasta la frontera con Argentina. El alimento consistía en trozos de bacalao salado, masa de harina con gorgojos, tortillas mal cocinadas. Las encías se ulceran y sangran, los dientes se caen.
Un día amanecieron muertos siete obreros y creyendo en un contagio de una extraña enfermedad, los obreros, sepultaron a los fallecidos en una pequeña isla ubicada en el delta del Baker. Los enterraron en ataúdes hechos con tablones de cipreses. Otro día fallecieron 28 obreros. Se les enterró sin escribir su nombre en la cruz.
Pasan más de ocho meses y los sobrevivientes permanecen aislados y abandonados en las instalaciones de la Compañía Explotadora del Baker, un sitio donde mas de un centenar de hombres encontraron la muerte. Nadie viene en su ayuda, nadie los saca de ese infierno, atrapados entre el mar y una selva húmeda, allí se quedaran hasta que en octubre de 1906 llega un barco y por fin rescata a los pocos sobrevivientes. Desnutridos y sin dientes toman el camino de regreso, muchos morirán en el viaje, otros al llegar a sus pueblos. En el Bajo Pisagua, en una isla, queda un cementerio, como único testigo de la tragedia. El misterio permanecerá en la Isla de los Muertos.
No se sabe que hizo que los obreros enfermasen a los pocos meses de llegar a su destino, comerse la comida en mal estado tubo que ayudar y mucho, pero eran hombres fuertes, acostumbrados al esfuerzo físico, pero de repente se encontraron flojos, sin fuerzas. Algunas fuentes culparon a la Compañía Explotadora del Baker de envenenarles para no tener que pagarles los sueldos, según esta teoría la comida ya estaría envenenada y los obreros irían muriendo poco a poco.
Otros piensan que aquellos obreros murieron envenenados a causa de consumir alimentos contaminados con pesticidas que el barco llevaba en la misma bodega donde se transportaban los alimentos.
Hoy la Isla de los Muertos es Patrimonio Historico y un lugar de peregrinación turística a unos pocos kilómetros de Caleta Tortel, un pueblo de calles de madera, a la orilla del mar que es el único camino para viajar por la Patagonia Insular.
Desde hace años la isla es víctima de las crecidas del río Baker que se ha llevado las tumbas periféricas y parte de la vegetación que protege el recinto. Ya por el año 1945, el padre salesiano Alberto Agostini mencionaba 120 sepulturas, para al año siguiente el explorador A. F. Tschiffely reconocía tan solo 79 y hoy solo quedan 33.
Fuentes:



jueves, 21 de marzo de 2013

Gary Michael Heidnik

Gary Michael Heidnik nace el 22 de noviembre de 1943, en el barrio de Eastlake de Cleveland, en Ohio, Estados Unidos.
Cuando Gary Michael tenia edad de un año y medio, sus padres se separan, Gary y su hermano Terry se fueron a vivir con su madre, que al poco tiempo volvió a casarse. cuando Gary tuvo edad de ir al colegio, él y su hermano se trasladaron a vivir con su padre, quien también se volvió a casar.
El padre de Gary era muy severo, lo maltrato sicológicamente durante su infancia. A pesar de eso, Gary y su hermano fueron dos chicos normales. A los catorce años ingreso en una academia militar donde obtuvo excelentes notas, pero abandonó la academia y volvió a casa con su padre.
Al volver a casa empezó a recibir tratamiento psiquiátrico por problemas mentales. Su hermano Terry también estaba recibiendo tratamiento y los dos tuvieron intentos de suicidio, lo cual hace pensar que, existía una base genética y no se puede pensar que hayan llegado a ese estado por el padre, que aunque era severo no llegaba a golpes y a la violencia desmedida.
Gary ingresó en el Ejército inmediatamente después de terminar la secundaria, y cuando empezó a ganar dinero, Gary se dio cuenta de la libertad que tenia, y se dio cuenta que el dinero se podía obtener sin tener que trabajar.
Después de haber entrado al Ejército con 18 años, Gary se hizo prestamista, consiguiendo unos ingresos nada desdeñable prestando dinero a sus compañeros. Pero fue trasladado a la base en Landsthul, en Alemania, con lo que no pudo recuperar grandes sumas de dinero.
En Alemania siguió con su tratamiento psiquiátrico. Sufría de dolores de cabeza y visión borrosa, un doctor se fijó en un movimiento espasmódico que sufría y cómo sacudía repentinamente la cabeza. Le recetó un tranquilizante para pacientes que sufren de alucinaciones. A su regreso a los Estados Unidos, se licencio con honores y se le da una pensión vitalicia por incapacidad mental, Gary ya no tendría que trabajar para vivir, pues recibiría unos 2000 dólares al mes. Gary cuidaba su imagen de trastornado siempre que visitaba a la Administración de Veteranos, repetía todo sus tics, procuraba llamar la atención y descuidaba su aspecto, los veteranos habían catalogado a Gary como agresivo.
Gary sentía fascinación por mujeres negras, posiblemente esto le venga de la afición de su madre por los negros, que tras divorciarse del padre de Gary, se había vuelto a casar dos veces, ambas con hombres negros. También quizá por eso, Gary decia que él era negro en los documentos oficiales, a pesar de ser blanco y con ojos azules.
Aunque la madre de Gary era alcoholica, él la quería mucho, y cuando ella se suicidó tras sufrir un cáncer, Gary se deprimió de tal manera que tuvo que recibir medicación para tratar su crisis. Con su padre, el trato era muy diferente, pues no le había vuelto a dirigir la palabra desde 1961. 
El problema mental de Gary, le venia de trastornos que le impedían una vida normal. En un test de inteligencia que hizo, su coeficiente intelectual fue de 148, un nivel próximo al de genio, según dijeron los expertos.
Gary sí sacaba provecho a su intelecto, entendió los mecanismos de los mercados financieros e invirtió dinero con lo que consiguió un buen capital.
Gary tenía mucho dinero, pero por su apariencia no lo parecía. Su casa ni su forma de vestir denotaban que tuviera dinero, si se gastaba el dinero en coches, y sobre todo donde mas gastaba el dinero era en prostitutas, preferentemente chicas negras, por eso era frecuente encontrar negras en la casa de Gary, y no solo una sino varias, ya que le gustaba meterse a su cuarto con varias al mismo tiempo.
Al elegir pareja, solía escoger también chicas de color, a las que les compraba cosas caras pero también las maltrataba. Ya fuera en el plano sexual o de pareja a Gary le gustaban las chicas de color y con una baja capacidad mental, porque tenia la necesidad de sentirse superior a ellas.
Gary anhelaba tener hijos, y 1977 embarazó a Jeanette Davidson, una mujer negra, analfabeta y con un coeficiente intelectual muy bajo. Gary no la dejaba acudir al médico, y fue una hermana de Jeanette la que llamo a la Policía para llevar a Jeanette a un hospital, donde se le tuvo que hacer una cesárea por el mal estado en que se encontraba. En cuanto al bebé, el estado asumió la custodia, al considerar que Jeanette y Gary no eran padres adecuados.
Gary tuvo tres hijos más con tres prostitutas negras distintas, todas eran deficientes mentales y el estado dictaminó que las prostitutas no eran unas madres adecuadas, de modo que los tres hijos le fueron arrebatados.
Cierto día, según contó Gary, Dios le ordenó que creara una iglesia y tuviese mucha descendencia. Esa iglesia se dedicaría a la gente marginada negra (hombres y mujeres) con deficiencias mentales y físicas. La iglesia se fundó en 1971 y se llamó la Iglesia Unida de los Ministros de Dios.
Tony Brown un amigo de Gary iba todas las mañanas en una furgoneta por el vecindario, recogiendo gente de la congregación para ir a misa, donde ponían música y Gary daba un pequeño sermón, luego invitaba a sus feligreses a comer hamburguesas en un McDonald’s, razón por la cual se le llamó “El Obispo de Las Hamburguesas”.
Gary y Jeanette Davidson fueron a visitar a una hermana de esta, llamada Alberta Davidson, al centro para retrasados mentales donde se la tenía recluida desde hace varios años, Gary y Jeanette se llevaron a Alberta de paseo. Pasadas varias horas sin noticias, el centro aviso a la policía que se persono en la casa de Gary, encontrando a Alberta metida en un cubo de basura en el sótano, estaba desnuda y con signos de haber sido agredida sexualmente. Gary por este hecho fue condenado en 1978 a una pena de entre 3 a 7 años de cárcel, en cuanto a Jeanette, esta fue encontrada asesinada pero no había pruebas que relacionara a Gary con esta muerte. pero siguió siendo el principal sospechoso, y posiblemente Jeanette Davidson fue la primera persona asesinada por Gary Michael Heidnik. 
Cuando salio de la carcel en 1983, Gary vendió su casa en West Filadelfia y compró una casa en North Marshall Street. Puso barrotes en cada ventana, puso alambres de púas y mandó a hacer una pesada puerta de acero para la entrada, convirtiendo la casa en una fortaleza.
Las paredes de la casa estaban empapeladas con dinero, tenia un armario repleto de cine de terror, vídeos porno y libros pornográficos con chicas de color. Había un sótano donde yacía un colchón, una lavadora, una pequeña nevera y un montón de escombros desperdigados por aquel lugar donde tablas de madera impedían que la luz pasase por las ventanas, escondiendo ese lugar de miradas indiscretas que interrumpieran las oscuras actividades que allí tendrían lugar.
Betty Disto
En 1985, Gary decidió casarse con Betty Disto una chica filipina que dos años antes había conocido mediante una agencia matrimonial. A diferencia de anteriores parejas, Betty era de raza asiática, no era prostituta, no tenía retardo mental. Gary la convenció que dejara Filipinas gracias a su dinero, porque Gary deseaba una virgen oriental. Además, guardaba la esperanza de tener un hijo.
El matrimonio con Betty duró realmente poco, Gary desde el primer dia le fue infiel, se acostaba con prostitutas delante de ella, y la obligaba a cocinar para las chicas. Además de serle infiel cínicamente, comenzó a golpearla cuando se quejaba y a privarla de comida, la amenazaba con matarla si intentaba irse.
En 1986 cuando Betty perdió la paciencia y se quejara de verlo otra vez con una prostituta de color, éste, enfurecido, la agarró, la golpeó y la violó anal y vaginalmente delante de la prostituta negra, y la amenazó nuevamente con matarla si se iba. Pasados cuatro días, Betty desapareció y dos semanas después Gary Heidnik fue detenido y acusado de violación conyugal y agresión. Betty no se presentó en las audiencias y los cargos fueron retirados. En 1987 reaparecería para exigir el pago de una pensión por un hijo que tuvo de Gary pero del cual éste nunca se había enterado.
Josefina Rivera
JOSEFINA
Josefina Rivera había comenzado a prostituirse siendo adolescente, llegando a tener tres hijos que el Estado le quitó por considerarla incapaz de cuidarlos. Era una noche de noviembre de 1986 cuando, apareció Gary en su flamante Cadillac. Gary vestía una chaqueta de cuero y olía mal, pero, su ostentación de oro y su reloj Rolex, convenció a Josefina que podría ser el cliente perfecto, así que le ofreció una sesión por un precio relativamente barato.
La llevó a su casa y allí le preguntó si quería ver porno o terror antes, pero Josefina le dijo que no. Entonces Josefina subió al piso de arriba y allí se encontró una una gran cama de agua y un aparador. Gary le arrojo un billete de veinte dólares, después de lo cual se desnudó, y empezó a hacerlo.
Acabada la sesión, Josefina fue a vestirse, pero Gary le impidio hacerlo, la esposó y la llevó hasta el sótano donde le quito su billete de veinte dólares.
El sótano estaba sucio y húmedo. Gary le colocó una cadena a Josefina y la ató a una tubería. Josefina comenzó a gritar y a llorar, Gary la abofeteó y la empujó, haciéndola caer sobre un mugriento colchón. Sorprendentemente, luego de eso no la golpeó más, se le acercó, la consoló y se durmió…
Al día siguiente, un 27 de noviembre de 1986, Josefina viendo que Gary no estaba, consiguió quitar los tablones de la ventana, por la cual salió a pesar de seguir atada a la tubería, ya que la cadena era lo suficientes larga como para permitirle ir a busca ayuda. Una vez que estuvo fuera, gritó en busca de ayuda, pero antes de que alguien apareciese, Gary apareció, la golpeó y la metió arrastrándola como si fuese un animal, tapo otra vez la ventana, y encendió la radio a todo volumen.
SANDY
Ya en el sótano y a pesar de que la radio seguía encendida, Josefina escuchó claramente a una mujer quejándose y los sonidos de una cadena arrastrada por el suelo. Poco tiempo después, el corazón le dio un vuelco cuando Gary entro y la arrastró por el sótano. Josefina miró hacia arriba y vio a otra mujer joven, negra, desnuda excepto por una blusa, encadenada a la tubería del techo de la misma manera, como lo había sido ella la primera noche. Se quedó mirando a la mujer que parecía estar completamente ajena a lo que le estaba pasando. Gary más tarde presento a la chica como Sandy Lindsay antes de dejarlas solas. Cuando Sandy habló a Josefina, esta comenzó a entender por qué la recién llegada parecía tan retraída, Sandy era retrasada mental.
Sandy le dijo a Josefina que era amiga de Gary hacia varios años, desde que se conocieron en el Instituto Elwyn, que era un hospital local para enfermos mentales y discapacitados físicos. Ella describió a Gary como un buen amigo que siempre cuidaba de ella. Con una voz carente de emoción ella describió cómo había tenido sexo con frecuencia con Gary y su amigo Tony. Más tarde, ella quedó embarazada, pero tuvo un aborto. Cuando Gary se enteró, montó en cólera y le ofreció mil dólares para tener a su bebé. Cuando ella se negó, Heidnik la secuestró y se la llevó a la casa. Cuando terminó de contar su historia, Sandy se disolvió en lágrimas cuando empezó a darse cuenta de su situación.
Un día Gary le dijo a Sandy que su hermana y dos primos habían venido en busca de ella, pero se había ido suponiendo que no hay nadie en casa. Más tarde le obligó a escribir una nota a su madre diciéndole que ella se había ido y le llamaría más tarde. Su madre pensaría que Sandy se había escapado. Aunque Sandy no pareció entender la implicación de la nota, Josefina comprendió que Gary iba a mantener esta situación indefinidamente.
A medida que los días se convertían en semanas, el comportamiento de Gary se hizo cada vez más extraño. Él les daba de comer de forma esporádica y las mantuvo semidesnudas para que pudiera satisfacer su apetito sexual cuando le daba la gana, que era a menudo. Cuando él se ausentó, se acurrucaron juntas para darse calor y esperaron con temor por su regreso. En una ocasión, trataron de pedir ayuda, lo que dio lugar a palizas salvajes. Cualquier desviación de sus reglas era castigado con palizas o un período de encarcelamiento en un agujero. Otra forma de castigo era unir a las chicas a una vigas sujetas por un un brazo y dejarlas suspendidas en el aire durante horas y horas.
Mientras Gary estaba desarrollando sus habilidades como torturador, la madre de Sandy la estaba buscando activamente . La madre le dijo a un oficial de policía que creía que su hija estaba siendo retenida contra su voluntad por un hombre al que conocía sólo como Gary que vivía en la calle 3520 de North Marshall. Ella le dio al oficial toda la información que incluía un número de teléfono, pero no pudo proporcionar un apellido. El oficial trató de llamar al número e incluso fue a la casa, pero no obtuvo respuesta y finalmente abandonó la investigación.
LisaThomas
LISA
Alrededor de Navidad, Gary Heidnik recorrió las calles en busca de otra mujer. Cuando pasaba por Lehigh Street, la vio. De diecinueve años de edad, Lisa se dirigía a casa de una amiga cuando Gary se detuvo junto a ella con su Cadillac. Se asomó por la ventana e hizo un comentario sugestivo que a ella le enojó y le dijo que ella no era una prostituta. Rápidamente Gary se disculpó y le ofreció dar un paseo en su coche. Apaciguada por el cambio en el comportamiento y su coche impresionante ella aceptó.
Él llevo a la joven a su casa con la excusa de llevar la compra y coger algo de ropa. Luego drogó a Lisa metiendo alguna sustancia en el vino que le ofreció y cuando ella se desmayó, él la violó, la esposó y la llevó al sótano con sus otras "esclavas".
Ahora había tres mujeres jóvenes de las diez que planeaba secuestrar Gary. Empezaron a preguntarse como lo harían para vivir en un sótano tan pequeño las diez, y mucho menos con los hijos que eventualmente pudieran tener. Su única esperanza era que una de ellas o una futura víctima pudiera escapar y alertara a la policía.
Deborah Dudley
DOS MAS
Diez días más tarde, Gary al regresar de uno de sus viajes trajo otra mujer llamada Deborah Dudley, de veintitrés años, Deborah no estaba dispuesta a permitir que Gary la forzara sin luchar. Desde el momento en que la encadenó al sótano, Deborah comenzó a cuestionar su autoridad en cada oportunidad, que por lo general le valió una salvaje paliza. Su llegada también creó tensión entre las otras, ya que cada vez que desobedecía a Gary las castigaba también. Las palizas se convirtió en un evento regular. Durante este tiempo, Josefina comenzó a ganarse su confianza, mostrando un nivel de lealtad y obediencia que convenció a Gary de que ella realmente disfrutaba siendo una de sus "esposas".
Su apetito sexual también cambió con la llegada de Deborah, aparte de tener relaciones sexuales con todas ellas, a menudo las obligaría a tener relaciones sexuales entre sí mientras él miraba.
La cantidad y tipo de alimentos que proporcionaba pareció cambiar de acuerdo a su estado de ánimo. Algunos días les daba sólo pan y agua. Al día siguiente rancios hot dogs o un sándwich de mantequilla. Finalmente resolvió el problema dándole a las chicas alimento enlatado para perros y golpeándolas hasta que se lo comían. 
Jacqueline
El 18 de enero Heidnik salió de nuevo y volvió con otra chica. Había cogido una pequeña de dieciocho años de edad, de nombre Jacqueline en el lado norte de la ciudad y la trajo a su casa. La violó y la arrastró hasta el sótano, pero cuando llegó el momento de encadenarla, se encontró que los grilletes eran demasiado grandes para sus pequeños tobillos y utilizó esposas en su lugar. Más tarde ese día, compró comida china y champán. El motivo fue el cumpleaños de la mujer que se está convirtiendo rápidamente en su favorita, Josefina.
Josefina mas tarde revelaría que Heidnik estaba de buen humor porque tenía la idea de que ella y Sandy se habían quedado embarazada de él, cuando ésto no era verdad.
EL SOTANO DE LA MUERTE
A principios de febrero de 1987, Gary encontró una razón para castigar a Sandy cuando él la cogió tratando de mover la madera que cubría la fosa. El castigo fue severo. la colgó de una viga del techo con unas esposas atadas a su muñecas durante varios días. Durante este tiempo, su condición se deterioró y se negaba a comer. Aún creyendo que ella estaba embarazada, Gary intentó alimentarla con pedazos de pan. Hacia el final de la semana, a pesar de que estaba vomitando y con fiebre alta, Gary siguió alimentándola a la fuerza. Al día siguiente, ella perdió el conocimiento. Cuando Gary no pudo despertarla, se enojó y le abrió las esposas, dejándola caer al suelo. Les dijo a las demás que ella estaba fingiendo y le dio patadas en la boca y la dejó allí mientras él servía helados para todas y se fue. Cuando volvió, sacó a Lindsay fuera del sótano y comprobó su pulso. Estaba muerta.
Después de decirle a las chicas que había muerto, subió a la casa el cuerpo de Sandy. Poco tiempo después, se estremecieron de horror al oír el silbido inconfundible de una sierra eléctrica. Su horror más tarde se volvió en repugnancia cuando uno de los perros de Gary entró en el sótano con un hueso carnoso y procedió a devorarlo al frente de las aterrorizadas chicas. Los investigadores más tarde revelarían que Gary había triturado la carne de Lindsay usando un procesador de alimentos, y alimentó a sus perros y a las cautivas, mezclandola con comida para perros. Para la eliminación de las restantes partes del cuerpo, las cocinó en el horno.
En los días que siguieron a la muerte de Sandy, las chicas empezaron a notar un olor nauseabundo que llenó toda la casa. Con el tiempo, llegaría a ser tan malo que los vecinos se quejaron de Gary a la policía. Después de varias llamadas de ese tipo, un patrullero fue enviado a la casa para hacer preguntas pero se fue después que Gary le aseguró que el olor se debía a una cena de asado cocido.
Cuando Deborah Dudley empezó a causar problemas, la soltó y la llevó escaleras arriba. Cuando regresaron, Deborah estaba muy tranquila y solemne. Las demás le preguntaron qué había pasado. Tartamudeando de miedo, les dijo que la había llevado a la cocina y le mostró una olla que tenía en la estufa. El interior estaba la cabeza de Sandy Lindsay. Luego abrió el horno y le mostró parte de la caja torácica de Sandy que se estaba asando. Al abrir la nevera, le enseño un brazo y otras partes del cuerpo que había envuelto en plástico y le dijo que si no comenzamos a obedecerlo,ella sería la próxima.
A los pocos días, Deborah había recuperado la compostura y continuó desafiando los intentos Gary de "domarla". Como un incentivo adicional para obedecer, Gary añadió un nuevo castigo, su propia versión de descargas eléctricas. Su método era sencillo. Quitó el aislamiento de un extremo de un cable de tensión eléctrica y el otro conectado a un enchufe. Luego, él juntaría los cables pelados contra cada una de las cadenas de la chica y miraba con diversión como se retorcían para escapar de la corriente. Josefina estaba exenta de castigo.
A medida que pasaban las semanas, Gary comenzó a tratar a Josefina como una pareja mas que como una cautiva y pasó cada vez más tiempo a solas con ella. Tanto es así que, el 18 de marzo, cuando Gary decidió castigar a las otras, Josefina le ayudó. El tratamiento de choque se empleó de nuevo con una característica adicional, el agua. Después de perforar respiraderos en una tapa de madera contrachapada, Gary ordenó Josefina que llenara el pozo con agua. Las otras tres mujeres, aún encadenadas, fueron empujadas hacia el pozo. Metió el cable pelado por uno de los agujeros hasta que tocó brevemente una de las cadenas que envió una descarga de electricidad por la cadena de Deborah. Deborah gritó y se estremeció incontrolablemente antes de caer boca abajo en el agua.
Al ver a su amiga caer Jacqueline y Lisa gritaron hasta que Gary quitó la cubierta y arrastró fuera a Deborah. Tras cercionarse de que estaba muerta, Heidnik tranquilamente hizo sándwiches y le dijo a las mujeres: "¿No estáis contentas de que no fuerais una de vosotras?." Luego salió por unos minutos y regresó con un lápiz y papel. Se los entrego a Josefina, mandó escribir la fecha y la hora en la parte superior de la página. Cuando ella lo había hecho, le hizo escribir una declaración que detalla cómo ella le había ayudado a electrocutar a Deborah. Luego le ordenó que lo firmase antes de agregar su propia firma. Sosteniendo la carta, entonces le dijo: "Si alguna vez vas a la policía, puedo usar esto como evidencia de que tu mataste a Debbie." Satisfecho de que la tenía completamente bajo su control, le quitó las cadenas a Josefina y le dijo que podía ir arriba. Al día siguiente, Heidnik volvió al sótano y, después de envolver el cuerpo de Deborah en plástico, lo puso en el congelador y se fue.
LIBRE
Tras la muerte de Deborah Dudley, Josefina se convirtió en compañera inseparable de Gary, a menudo le acompaña en salidas a los restaurantes y a comprar. En una salida, Gary dijo a Josefina que si alguna vez lo cogieran, él actuaría como si estuviera loco. Él le dijo que él había estado engañando a las autoridades durante años para poder optar a los pagos por incapacidad. Gary también pareció suavizarse después de que Deborah murió y comenzó a proporcionar comodidades adicionales para sus cautivas como colchones, mantas, almohadas y hasta un aparato de televisión mientras Josefina, en un papel como de confidente, se ganó el dudoso honor de compartir la cama de Gary.
En un viaje a las afueras de Nueva Jersey, Gary detuvo el coche cerca de una zona muy boscosa y comentó que sería un buen lugar para esconder el cuerpo de Deborah. La noche siguiente, 22 de marzo mientras Josefina esperaba en el vehículo, Gary arrojó el cadáver en el bosque.
Al día siguiente, Heidnik le dijo que tendría que encontrar un "reemplazo" de Deborah y sugirió salir en conjunto para encontrar una. Más tarde esa noche, la pareja recorrió las calles en busca de una posible victima. 
Agnes
Heidnik encontró una nueva víctima, Agnes, a quien convenció de ir a casa con ellos. Poco después de llegar a la casa, Agnes se encontró desnuda, encadenada y encerrada en el sótano con las demás. Para Gary, Josefina era de confianza, pero ella tenía otros planes y estaba dispuesta a esperar el momento adecuado para su aplicación.
Su oportunidad llegó finalmente el 24 de marzo, cuando después de días de súplicas y halagos, convenció Gary que si la dejaba ir a ver a su familia, ella le traería de vuelta una nueva "esposa" para su colección. Gary, deseoso de ampliar su "familia" estuvo de acuerdo con la condición de que después de visitar a su familia, ella recogía a una mujer y se reuniria con él en una gasolinera cerca de su casa a medianoche. Más tarde esa noche, Gary la dejó cerca de su casa y se fue. En cuestión de segundos, Josefina fue corriendo hacia el apartamento que compartía con su novio, Vincent Nelson.
Cuando Nelson abrió la puerta, Josefina dejó escapar su increíble historia. Relató cómo había sido hecha prisionera, torturada y abusada sexualmente, Nelson preguntó si había perdido la razón. Mientras trataba de calmarla, ella continuó describiendo escenas con la muerte, alimentos para perros y partes del cuerpo hasta que Nelson se ofreció a ir a la casa de Gary y enfrentarse a él. Pero Josefina le convenció para que llamase a la policía.
Varios minutos después, dos agentes de policía, John Cannon y David Savidge llegaban. Nuevamente Josefina les contó su increíble historia. Al igual que Nelson, Cannon y Savidge también la encontraron difícil de creer hasta que Josefina levantó la parte inferior de sus pantalones y les mostró las cicatrices de las cadenas en los tobillo. Convencidos fueron a la gasolinera donde Gary estaba esperando en su Cadillac. Sacaron sus armas y se acercaron al coche, Gary levantó las manos y les preguntó si estaban allí con respecto a los pagos de manutención infantil. Se le dijo que se trataba de un asunto mucho más serio y fue puesto bajo arresto. Después de cuatro meses de horror indecible, el reinado de terror de Gary Heidnik finalmente llego a su fin.

EVIDENCIA
Justo antes de las 5 de la mañana del 25 de marzo 1987, un escuadrón de la policía bajo el mando del teniente de Homicidios James Hansen llegó al 3.520 Street North Marshall. No se podía acceder a la casa por el intricado sistema de bloqueo puesto por Gary, Hansen dio la orden de derribar la puerta. Uno de los primeros oficiales que paso a través de la puerta era Dave Savidge, uno de los hombres que habían detenido a Gary Heidnik. Siguiendo las indicaciones de Josefina, él y su compañero, el oficial de McCloskey fueron directo al sótano. 
Cuando Savidge entró en el sotano, vio a dos mujeres durmiendo en un colchón en el medio de la habitación. A pesar de las bajas temperaturas, su único abrigo era una manta delgada y sucia. A medida que se acercaba a ellas se despertaron y empezaron a gritar hasta que Savidge les aseguró que él era un oficial de policía que había venido a liberarlas. Se dio cuenta de que las mujeres estaban encadenadas a un tubo en el techo y no llevaban nada excepto blusas finas y medias. Cuando uno de los agentes les preguntó si habían más mujeres en la casa, señalaron una tabla de madera contrachapada en el suelo que tenía bolsas de plástico llenas de tierra apiladas encima.
Quitaron las bolsas y el tablero, y McCloskey vio la figura desnuda de Agnes en cuclillas en el fondo del pozo. Después de sacar a Agnes, la policía les quitó las cadenas a las mujeres y las llevó arriba a una ambulancia. Con las mujeres en libertad, la policía volvió su atención a la casa. En la cocina, Savidge encontró una olla de aluminio en el horno, muy quemada y que contenía una sustancia grasienta amarillenta. Sobre la encimera de la cocina había un procesador de comida industrial, que había sido utilizado recientemente, posiblemente para carne cruda. En el interior de la estufa, encontró una fuente de horno que contenía un trozo de hueso carbonizado que se asemejaba a una costilla humana. Hasta ese momento, Savidge aún luchaba por creer lo que había ocurrido realmente en la habitación, pero cuando abrió la nevera, lo que encontró eliminaron todas las dudas. Sobre un estante en el congelador había un antebrazo humano. 
Durante varios días, la policía registró la casa y los patios mirando cada pedazo de papel y material que encontraron. Excavaron en los patios delanteros y traseros, pero no encontraron restos humanos adicionales. En la casa se encontraron con un armario lleno de revistas pornográficas todas las cuales aparecían mujeres negras. Aunque la casa y sus alrededores daba la impresión de que el propietario tenia que ser una persona perturbada que vivía gracias a una pensión de veterano, más tarde se descubrió que Gary Heidnik era en realidad un hombre rico, después de haber acumulado una increíble cifra de 550.000$ en una cuenta de inversión Merrill Lynch. Mientras la búsqueda continuaba, la policía estaba interrogado a Gary para desentrañar la vida y los crímenes del individuo desaliñado, que la prensa ya había apodado "un loco vicioso".
¿LOCO?
El 23 de abril de 1987, Gary Heidnik compareció ante el tribunal por primera vez desde su detención. A su lado estaba su abogado, Charles "Chuck" Peruto. Gary había seleccionado a Peruto, un experimentado abogado de la defensa, famoso por defender casos sensacionales. La razón de la comparecencia era determinar oficialmente si el fiscal tenía una "causa probable" para celebrar un juicio contra Gary Heidnik por los crímenes de los que se le acusaba. Para el vicefiscal de distrito Charles Gallagher, la audiencia preliminar fue una mera formalidad, al presentar el caso del estado contra Gary Heidnik. Gary estaba acusado de asesinato, secuestro, violación, asalto agravado, relaciones sexuales desviadas, exposición indecente, detención ilegal, asalto simple, asalto indecente y otros delitos conexos.
La evidencia más condenatoria contra Gary fue el testimonio de las propias prisioneras. La primera en ser llamada fue Lisa, quien describió en detalle cómo Gary Heidnik la había encadenado, golpeado y violado. La siguiente en prestar declaración fue Josefina. Con voz clara y segura, ella relató su historia desde el momento en que entro en el Cadillac de Heidnik, hasta el momento en que fue puesta en libertad. Ella fue particularmente gráfica en la descripción de la muerte de Sandy Lindsay y el asesinato de electrocución de Deborah Dudley, sobre todo cuando ella admitió que había sido ella quien había empujado el cable de alimentación a la fosa. Peruto después interrogar a Josefina, la acusó de instigar muchos de los golpes y la electrocución de Dudley. Cuando Lisa declaró, ella también acusó a Josefina de ser socia de Gary en sus actos de muerte y depravación, sin embargo la evidencia fue refutada cuando Jacquelyn subió al estrado y dijo al tribunal que Josefina sólo ayudo a Gary cuando estuvo bajo amenaza de muerte o de castigo.
El proceso terminó con el Dr. Paul Hoyer de la oficina del forense del condado al prestar declaración en relación con las partes del cuerpo humano y otros restos encontrados en la cocina Heidnik. 
El juicio comenzó el 20 de junio de 1988 delante de una sala llena. Desde el principio, Charles Gallagher describe la acusación en todos sus detalles sangrientos, Chuck Peruto sabía lo que su defensa iba a ser, iba a alegar que su cliente era culpable de todos los cargos, pero trataría de demostrar que Gary Heidnik estaba loco.
Charles Gallagher comenzó a llamar a sus testigos al estrado. Durante dos días, el jurado de seis blancos y seis negros, escuchó el testimonio de las secuestradas, sus familias, la policía y los médicos forenses. Cuando el juez oyó el último de los testigos de la fiscalía, Chuck Peruto solicitó que la acusación de asesinato en primer grado fuera eliminada por considerar que la intención de matar no había sido probada. El Juez Lynne Abraham rechazó la petición.
Chuck Peruto centró su defensa en torno a dos hombres, el psiquiatra, el Dr. Heidnik Clancy McKenzie y el psicólogo Jack Apsche. Peruto le preguntó aMcKenzie su opinión sobre el aspecto más importante de una defensa por demencia. ¿En el momento de los delitos, Gary Heidnik sabia la diferencia entre el bien y el mal? McKenzie respondió que Heidnik no sabía la diferencia.
Al día siguiente, el caso de la defensa recibió otro revés cuando el juez Abraham se negó a admitir la mayor parte del testimonio del psicólogo Jack Apsche sobre historia mental de GaryHeidnik.
Peruto luego jugó su última carta al llamar al Dr. Kenneth Kool, otro psiquiatra. Kool dio su opinión profesional con respecto a la cordura Heidnik, El juez Abraham decidió que su testimonio solo intentaba "confundir al jurado" y pidió que la mayor parte de ella se suprimiera.
El fiscal Gallagher llamó a un testigo adicional, Robert Kirkpatrick, corredor de bolsa de Gary Heidnik. Kirkpatrick dio pruebas de que Gary era "un inversor astuto que sabía exactamente lo que estaba haciendo". No hubo mas testigos que llamar y comenzaron las deliberaciones finales.
Finalmente el 30 de junio de 1988, el jurado estaba listo. Gary fue condenado por dieciocho cargos. Dos cargos de asesinato en primer grado, cinco cargos de violación, seis cargos de secuestro, cuatro cargos de asalto y un cargo de relaciones sexuales desviadas. Justo como lo había hecho durante todo el juicio, Heidnik no manifestó ningún signo de emoción cuando se leyó la sentencia.
EPILOGO
Jacquelyn, Agnes y Lisa sufren secuelas por los de los daños que les infligió Gary Heidnik. Junto con Josefina, iniciaron un procedimiento civil para tener acceso a los fondos de Gary Heidnik en la cuenta de Merrill Lynch para dividirse el dinero en partes iguales entre ellas, en concepto de indemnización penal. Durante once largos años, Gary Heidnik esperó en la cárcel el cumplimiento de su sentencia de muerte. Durante ese tiempo hubo varios intentos de suicidio. Finalmente el 6 de julio de 1999, a las 10:29 pm, Gary Michael Heidnik fue ejecutado por inyección letal. Después de su muerte, ningún miembro de su familia reclamó su cuerpo.
 
Fuentes:

 

 
 



 
 
 


 

 

martes, 12 de marzo de 2013

ABDUCCION: EL CALVARIO DE HIGDON


Carl Higdon, de 41 años de edad, perforador de pozos de petróleo, esposo y padre de cuatro hijos, no era un hombre propenso a creer en historias de fantasía, pero en la tarde otoñal del 25 de octubre de 1974, tuvo un encuentro cercano con un ser que no sólo pondría a prueba los límites de su imaginación, sino, literalmente, lo llevaría al viaje de su vida.
Al igual que muchos estadounidenses en la década de 1970, el trabajador Carl Higdon fue duramente golpeado por la recesión. Como los precios de los alimentos estaban cada vez más altos, Higdon decidió que iba a tener que cazar para alimentar a su familia, y llenar su nevera con carne suficiente para pasar el duro invierno de Wyoming que estaba a la vuelta de la esquina. Sería durante una expedición de caza que Higdon pasaría de ser el cazador a ser la presa.
El día comenzó como cualquier otro. Higdon despertó y se preparaba para el día de su segundo turno de trabajo en la Empresa de Servicios AM Wells en Riverton, cuando sonó el teléfono. Él describió la situación:"Estaba todo listo para ir a trabajar cuando uno de mis hombres claves llamó por teléfono para decirme que estaba enfermo. Sin él nada podía hacerse, decidí tomarme el día libre".
Carl Higdon
Habiendo decidido en no ir a trabajar, Higdon decidió utilizar su día libre en ir a cazar alces. Con su plan en marcha, comenzó a dirigirse hacia McCarthy Canyon en el condado de Carbon. Fue entonces cuando el azar cambiaría para siempre su vida.
Mientras iba hacia McCarthy Canyon, Higdon decidió cambiar de rumbo y empezar a conducir hacia la región norte de Parque Nacional de Medicine Bow, que se encuentra a tan sólo 40 kilómetros al sur de su casa en Rawlings. Higdon llego al parque por la tarde. Una vez allí, se sorprendió al encontrarse con un viejo amigo:
"Alrededor de las cuatro, estacioné mi camioneta en una loma y saqué mi termo para servirme una taza de café. Un viejo amigo, Gary Eaton, se acercó al lugar donde yo había estacionado y juntos hicimos una inspección de la zona. Después de unos minutos, Gary me dijo que iba más arriba en el bosque. En tono de broma sugirió que podría asustar a algún alce para mí. "
Higdon y su amigo se separaron, Higdon cogió su nuevo rifle Magnum, cargado con potentes balas de 7mm.Higdon caminó durante un rato y luego, por el rabillo del ojo, vio un destello de movimiento. Era exactamente lo qué estaba buscando, una pequeña manada de alces. Higdon en silencio levantó su pesado rifle, busco una presa y apuntó al macho más grande:
"Caminé unos cinco minutos, hasta que llegué a un claro del bosque, había cinco alces. Desde mi punto de vista, a varios cientos de metros de distancia, pude ver que uno de ellos era un animal realmente excepcional. Yo apunte con mi mira telescópica y dispare el arma, un rifle Magnum. Te puede dar un gran golpe en el hombro si no tienes cuidado. "Sería en ese momento cuando el mundo de Carl Higdon tomaría un giro hacia lo paranormal.
A TRAVÉS DEL ESPEJO:
Tan pronto como Higdon apretó el gatillo de su rifle se quedo asombrado por el hecho de que no sintió retroceso alguno del rifle. Más desconcertante todavía fue el hecho de que no oyó detonación. De hecho, de acuerdo con Higdon, era como si el mundo entero se hubiera detenido.
Como si todo eso no fuera ya lo suficientemente extraño, por primera vez en su vida Higdon comprobó que él era capaz de ver como la bala salia del cañón de su rifle y se dirigía hacia delante como a cámara lenta. Higdon más tarde juró que vio como la bala se deslizó unos 50 pies antes de que se desplomara en la nieve delante de él. En las propias palabras de Higdon:
"¡Yo no entendía que pasaba! En lugar de una ruidosa detonación, la bala de 7mm dejó el cañón del rifle sin hacer ruido y en cámara lenta. Flotaba como una mariposa, finalmente cayendo al suelo a unos cincuenta metros de donde yo estaba. Yo estaba asombrado. Me quedé helado. A mi alrededor había un silencio doloroso. No se oía ningún pájaro cantando o el susurro del movimiento de las hojas en los árboles cercanos. La única sensación que podía detectar era una sensación de hormigueo. Era similar a la sensación que se siente a menudo antes de una tormenta, cuando el aire está lleno de electricidad estática ".
Todavía inmerso en el silencio, Higdon recuperó la bala y la examinó de cerca. De inmediato vio que la parte principal de la bala había desaparecido y que estaba extrañamente deformada.
Se guardo la bala en el bolsillo y empezó a caminar. Fue entonces cuando el silencio que le rodeaba se rompió abruptamente por el sonido de una rama al romperse. Higdon se dio la vuelta y se topo con una visión que él supo de inmediato que no era de esta Mundo:
"Gire a mi izquierda, vi a un "hombre" de pie allí. Al principio pensé que no era más que otro cazador, así que bajé mi arma. Luego salió de las sombras, a la luz, y de inmediato me di cuenta de que algo andaba mal, muy mal ... Mi corazón dio un vuelco y mis rodillas temblaban tanto que apenas podía soportarlo. Pensé: “Caray, yo debería haber estado en McCarthy Canyon como originalmente había planeado, y no aquí.”
 La entidad estaba vestido con un ceñido traje, negro, de una pieza que Higdon decía era: "Similar a los trajes de neopreno, que llevan los buzos."
En lo alto del traje había un par de correas de arnés, que cruzaban su pecho, debajo de la cual había un cinturón metálico adornado con una estrella amarilla, grande, de seis puntas. Debajo de la estrella había una insignia que no pudo identificar. Higdon describe la entidad en detalle:
" El visitante no tenía orejas. Sus ojos eran pequeños y carecía de cejas ... La cúpula de su cráneo estaba cubierto por un grueso pelo. Parecía como si tuviera paja que creciera en su cabeza ... [su tez era] muy similar a la de un Oriental ... Yo estimaría más de dos metros y pesaba alrededor de 180 libras. ¡Esto no era ningún fantasma! ¡Dios mío, él era de carne y hueso. Amén!".
Higdon describiría a esta criatura con unos inquietante rasgos faciales, que incluye un labio inferior, que ocultaba tres dientes excepcionalmente grandes, en la parte superior, un par de antenas y, lo más alarmante para Higdon, una cara que se mezclaba directamente con su cuello. Higdon continuó su explicación de la entidad:"En lo personal, me costaba acostumbrarme, a mirarlo sin obtener una sensación de náuseas en la boca del estómago. No tenia barbilla. Su rostro parecía mezclarse con la garganta. No tenía hueso en la mandíbula."
Más extraño aún es el hecho de que esta criatura tenía un puntiagudo apéndice que sobresale de su muñeca derecha y nada en absoluto en la izquierda. En este punto, el ser se acercó lentamente a un aterrorizado Higdon e hizo algo completamente inesperado ... le preguntó: "¿Cómo estás"
El cazador desconcertado admitió que estaba tratando de mantener la calma, cuando débilmente respondió:
"Muy bien." En este momento la criatura, como cualquier buen anfitrión, le preguntó si tenía hambre, pero antes de que Higdon pudiera responder, la criatura le envió un paquete pequeño, transparente flotando hacia él:"Él me envió un paquete levitando hacia mí. Abrí el paquete y encontré cuatro pastillas en su interior. Él me dijo: En Inglés, que tomara una de ellas. Ahora, normalmente no me gusta tomar pastillas, ni siquiera una aspirina, pero algo sucedió. Es como si yo no tuviera control sobre mis acciones. Así que ingerí una de ellas, y me guarde las otras tres en mi bolsillo".
EL GRAN ASCENSOR DE CRISTAL:
La mirada de Higdon captó un extraño objeto en forma de caja que absorbía los rayos del sol, en el claro detrás de la criatura:
"No lejos de nosotros, había un objeto transparente, en forma de cubo que descansaba en el suelo. A mí me parecía un enorme paquete de Navidad, como una caja. No pude ver ningún tren de aterrizaje o entrada ... Era mucho más pequeña que cualquiera de nuestros aviones comerciales y militares.
Al parecer intrigado por el temor con que Higdon estaba mirando a su “nave”, el extranjero pidió al cazador: "¿Quieres venir con nosotros?" Higdon, plenamente consciente del hecho de que él no estaba en condiciones de rechazar cualquier solicitud, y sin convicción, se encogió de hombros en señal de asentimiento. Fue en este punto que el tiempo parecía saltar hacia adelante, como siguiente recuerdo, Higdon dijo estar dentro de una nave en forma de cubo.
"Sin saber como, me encontré dentro de este artilugio. Fue instantáneo. Recuerdo mi cabeza tambalearse. Mis manos sudaban. De alguna manera la píldora que este hombre me dio debe haber amortiguado por lo menos algunos de mis sentidos, de lo contrario estoy seguro de que me habría puesto a llorar y tal vez incluso haberme desmayado. Soy una persona fuerte, pero soy también humano."
Higdon dijo que fue consciente del hecho de que ahora estaba sentado en un "asiento en forma de cubo" de respaldo alto y con lo que describió como unas "bandas" que le sujetaban los brazos y las piernas:"Me encontré atado a esta especie de silla. Mis piernas estaban igualmente atadas ".
Higdon estaba entrando en un estado de pánico, vio con horror como otro ser apareció de la nada, en ese momento, y este ser y su compañero le ponían una especie de casco sujeto a un cable en la cabeza, el cazador afirmó:
"me sentía como el monstruo Frankenstein".
Higdon observo una consola con tres palancas, que su anfitrión utilizaba para controlar la nave. El ser señaló con su"mano" a la palanca más larga y esta parecía moverse telepáticamente. Fue entonces cuando el cubo despegó.
El cubo transparente se cernía sobre el camión de Higdon:
"Cuando llegamos arriba de los árboles, mi anfitrión apuntó con su brazo a mi camioneta y esta desapareció - poof - se desvaneció en el aire!"
Space Needle de Seattle
UN MUNDO SIN PECES
Como si todo este calvario no fuera ya bastante, Higdon testificó que repentinamente al salir de la tierra, apareció ante él una esfera planetaria,
"en forma similar a una pelota de baloncesto" ... un planeta que él supo de inmediato que no era la Tierra.
La visión más memorable que Higdon recordó de su gira improvisada de este mundo aparentemente ajeno era una torre colosal que asomaba por encima de la superficie. Más tarde la compararía con la Space Needle de Seattle, pero a diferencia de su homónima terrestre, este enorme paraguas estaba cubierto de luces giratorias tan cegadoras que le dolían los ojos. El cazador estaba abrumado también por un sonido que se parecía a una máquina de afeitar eléctrica zumbando:
"Alrededor de esta torre giraban luces multicolores, no muy diferente de potentes focos. Las luces eran tan intensas que en realidad era doloroso para mantener los ojos abiertos. Estas luces eran tan brillantes que yo tenía mis manos en mi cara como un escudo protector".
Fue entonces que la nave aterrizó a unos 150 pies de distancia de la base de la torre, momento en el que el compañero de su anfitrión se desvaneció súbitamente.
A través de las paredes transparentes de la nave, Higdon vio lo que afirmaba eran cinco seres humanos, hablando entre sí. Los individuos consistía en una niña de pelo castaño que parecía tener unos 11 años de edad, una chica rubia unos pocos años mayor y una pareja de adolescentes que parecían tener unos 17 o 18 años. El grupo se completó con un hombre que parecía tener unos 50 años. La gente parecía estar hablando entre sí y no se dieron cuenta de Higdon.
Su anfitrión, que tan cordialmente le ofreció píldoras alimenticias y un viaje por el cosmos, no explicó la presencia de los otros seres humanos, pero si le explicó que habían aterrizado en un planeta que estaba a 163.000 "millas luz "de la tierra.
Higdon se apresuró a aclarar que la criatura no dijo "años luz", y que le indicó que:
" Para ellos el paso del tiempo es diferente de lo que es para nosotros".
Su anfitrión escoltó a Higdon a la deslumbrante torre. La pareja subió en un ascensor, que los depositó en una habitación donde se coloco al cazador de pie sobre una pequeña plataforma. Higdon señaló que parecía estar flotando justo por encima del suelo. Mientras flotaba hacia su destino, su anfitrión le explicó que no había peces en su planeta y que estos seres con aletas eran una de sus cosas favoritas de la Tierra.
EL EXAMEN:
En este punto, un dispositivo extraño que Higdon describió como parecido a un "escudo cristalino", se deslizó fuera de la pared y se detuvo frente al humano. El "escudo" era evidentemente algún tipo de dispositivo médico y examinó al hombre durante casi cinco minutos antes de desaparecer de nuevo en la pared.
Que te rechacen nunca es divertido, pero a Higdon le pareció un golpe de suerte cuando su guía turístico extraterrestre le dijo que le iba a devolver al lugar donde le habían encontrado por primera vez debido a que el examen había demostrado que no podria: "adaptarse a su propósito."
Higdon (quizás gracias a Dios) nunca supo a que se refería. Higdon se dio cuenta de que él y su compañero extraterrestre ahora estaban de vuelta en el interior del cubículo. Higdon estaba de regreso, su anfitrión admiraba rifle del ser humano y con un dejo de lamento admitió que le gustaría quedarse la "primitiva" arma como recuerdo, pero no le dejaban.
El ser telepáticamente le entregó el rifle de nuevo a Higdon, retiró las píldoras de su bolsillo, lo que consternó al cazador ya que representaba la única prueba concreta que tenía de este raro evento. Una vez mas, el extraño señaló la palanca mas larga. Fue entonces cuando nuestro intrépido héroe sufrió otro desorientador salto en el tiempo.
REGRESO OBLIGADO
Higdon se dio cuenta de que él ya no estaba encima de un mundo ajeno, que su compañero extraterrestre y su cubo milagroso lo habían transportado instantáneamente de vuelta a la Tierra. Dijo que vio su camión, que había sido inexplicablemente transportado unos 5 millas del sitio donde lo había estacionado dos horas y media antes. El cazador más tarde consideró la situación:
"Como estaba en un estado de estrés mental, este hecho no tuvo ningún impacto en mí hasta algún tiempo después. Sé que nunca podría haber conducido por ese terreno imposible, incluso si yo hubiera sido físicamente capaz de conducir, cosa que yo, ciertamente, no era "!En este punto, el hombre del espacio amablemente le dijo al terrícola: "Nos vemos." El capataz estaba abrumado por una sensación flotante y sin previo aviso se encontró de pie en el borde de una pendiente escarpada y rocosa. Las piedras sueltas no pudieron soportar su peso y de repente se encontró cayendo por una pendiente de 9 pies, golpeándose contra el duro suelo y lesionándose la cabeza, el cuello y el hombro.
ATASCADO EN EL BARRO:
Lo siguiente que recordó es que se tambaleaba por un viejo camino de tierra, fusil en mano y en un estado de amnesia casi histérico:"Yo no sabía lo que había pasado, quién era, ni dónde estaba. Lo único que podía pensar era en salir de allí lo más rápido posible y encontrar a alguien que me ayudase. "
Higdon estaba en tal estado de shock que pasó junto a su camioneta sin siquiera reconocerla. Cuando se dio cuenta de que estaba completamente solo en un camino de tierra, dio marcha atrás y se dirigió a su vehículo:
"Allí estaba yo, temblando, con los ojos llenos de lágrimas y sin saber quien era. Vi un camión estacionado fuera de la carretera entre unos árboles, y decidí meterse en el en busca de refugio y para mantenerme en calor. No me di cuenta que el camión era mio".
Acurrucado y tembloroso en estado de shock, Higdon fue sorprendido por una voz femenina que de pronto crujió por la radio CB: “
cogí el micrófono y me lo acerque a la boca. Me las arreglé para dejar escapar que yo estaba enfermo y perdido y necesita urgentemente ayuda. Cuando la voz del otro lado me preguntó dónde estaba, yo les dije que había visto un cartel que decía: North Boundary Nacional Forestal. Esto no parece ser de mucha ayuda, sin embargo, ya que no había absolutamente ninguna indicación, era la mejor pista que tenia”.
LLEGA EL RESCATE:
Un equipo de búsqueda dirigida por un sheriff local y acompañado por Margery, esposa de Higdon tuvieron un montón de dificultades para conducir por los caminos de tierra con sus vehículos con tracción en las 4 ruedas y no pudieron localizar al asustado cazador hasta casi la medianoche. Fue durante este difícil viaje que la esposa de Higdon y otros dos voluntarios afirmaron haber visto luces verdes, rojas y blancas en el cielo, pero estaban demasiado lejos como para saber su verdadero origen.
Más tarde se conocería de que dos residentes de Rawlins, Wyoming, y el Sr James Marliyn, afirmaron haber observado un brillo inusual en los alrededores de Forest Medicine Bow, al mismo tiempo que el grupo de búsqueda se dirigía hacia el cazador desaparecido.
No mucho después, los oficiales se sorprendieron al encontrar el vehículo de Higdon en un espeso bosque al lado de un barranco, la zona era impenetrable porque el suelo era una ciénaga, los vehículos de motor se hundían en el barro. De hecho, las condiciones eran tan malas que la policía se vio obligada a hacer el tramo final del recorrido a pie.
Aún más sorprendente fue el hecho de que no había huellas de neumáticos que llevaran a la ciénaga. El sheriff y sus hombres no podían comprender cómo Higdon había conseguido que su camioneta pasara por allí. A juzgar por las circunstancias, la única explicación era que la camioneta de Higdon hubiese caído de lo alto, desafiando toda lógica.
Como si las cosas no fueran ya lo suficientemente extrañas, cuando finalmente sacaron a Higdon del camión, este no paraba de gritar:
"Se llevaron a mi alce". Higdon no reconoció a su propia esposa.
Rápidamente llevaron al cazador y a su esposa a uno de sus vehículos, mientras que el resto de la policía se enfrentaba al problema de cómo conseguir lo aparentemente imposible, sacar la camioneta de la ciénaga. Finalmente se creó una especie de puente con árboles caídos y lograron remolcar el camión fuera de la ciénaga. Higdon más tarde describió la situación:
"Ellos inmediatamente me llevaron al hospital más cercano, donde fui puesto bajo observación día y noche. No fue sino hasta el día siguiente cuando comencé a recuperar la memoria y empece a recordar algunos detalles de mi terrible experiencia. "
UNA RECUPERACION MILAGROSA:
Los ayudantes del sheriff transportaron al cazador y a su esposa al Carbon County Memorial Hospital en Rawlins donde ingresó a las 2:30 am. Los médicos notaron que tenía los ojos inyectados en sangre y que parecía estar sufriendo de agotamiento nervioso, por no hablar de las lesiones que sufrió durante su caída en el barranco.
Después de una extensa serie de pruebas médicas, los médicos notaron que a pesar de condiciones lamentables en la que se encontraba Higdon, su sangre era extraordinariamente rica en nutrientes y vitaminas. Más curioso es el hecho de que en 1958 Higdon había sido hospitalizado después de que contrajera la tuberculosis, ya entonces los rayos X mostraron una significativa cantidad de cicatrices en los pulmones.
Sea como fuere, las radiografías que se tomaron después de su expedición intergaláctica en 1974 no mostraron tejido cicatricial en los pulmones y su médico , el doctor Tongo, señaló que algunos cálculos renales dolorosos que había estado plagando al cazador, habían desaparecido.
A pesar de sus órganos nuevos y mejorados, el hombre del petróleo aún permaneció petrificado e incoherente durante toda la noche y, según la mayoría de los informes, no logró recuperar sus recuerdos hasta el día siguiente, cuando su hija fue a visitarlo. Fue entonces cuando contó a su esposa, médicos y oficiales de policía su desgarrador encuentro y su viaje a otro mundo.
Si bien es difícil imaginar que su atenta audiencia no eran por lo menos inicialmente escéptica, nada impidió que los ufólogos y prensa local se enteraran de la aventura de Higdon. Margery, sin embargo, afirmó que nunca había dudado de la sinceridad de la extraña historia de su marido, diciendo a los reporteros del Star-Tribune:
"Yo le creí porque era él y porque yo estaba allí y vi un montón de cosas extrañas esa noche."
Aunque mostró una gran mejoría, el apetito de Higdon no regresó durante días (un hecho que atribuyó a las píldoras milagrosas) y se quejó de fuertes dolores en la base del cráneo y el cuello, alegando que se sentía como si su cuerpo hubiese sido tratado como un acordeón.
Después de tres días de observación, el amante de la naturaleza recuperado salió del hospital, al cuidado de su esposa y familia.
LA DESCONCERTANTE BALA
Pocos días después de la hospitalización de su marido, Margery descubrió la bala de 7mm aplastada que Higdon se había guardado. Higdon se encontraba confuso como para explicar como se había dañado la bala, por lo que Margery llevo la bala a la oficina del sheriff. Según Higdon:
"Nunca había visto algo así antes. Tan pronto como pudimos lo llevamos al Departamento del Sheriff del Condado de Carbon donde el oficial a cargo del análisis de balística la examinó a través de un microscopio. Me dijo que era de un rifle Magnum 7 mm, que es el calibre mi rifle. Devolviéndome el trozo de metal, señaló que nunca había visto una bala en esa forma o condición ".
El Sheriff inspecciono la bala deformada y afirmó que él nunca había visto algo igual. Estaba convencido de que era imposible dejar la bala en su forma actual y pensó que la bala probablemente no había golpeado con un objeto sólido, como un árbol o una roca. La chaqueta de cobre estaba al revés y la pieza de plomo había desaparecido.
La Organización de Investigación de Fenómenos Aéreos (ORAP) envió un experto metalúrgico, el Dr. Walter Walker, para inspeccionar la chaqueta. Después de un examen riguroso del objeto testificó que había chocado contra una superficie sólida con una fuerza inmensa.
En el Boletín APRO, vol. 23 No. 5, que se publicó en marzo de 1975, los investigadores estaban pensando en organizar un grupo de búsqueda para encontrar la pieza de plomo de la 7mm con la esperanza de que podría esclarecer contra que había impactado. Citado en el informe: "Después de que la nieve se derrita, intentaremos ubicar la pieza de plomo de la bala y espero que seamos capaz de añadir algo a esta historia tan desconcertante."
Por desgracia, el equipo de búsqueda no llegó a buen puerto, sus esfuerzos no encontraron nada, quedando la bala destrozada como la única evidencia física para apoyar la historia de Higdon. A pesar de la falta de corroboración de la prueba, el 29 de octubre de 1974, el diario Times Rawlins publicó el relato de la experiencia extraordinaria de Higdon y de ahí la historia se propagó como un reguero de pólvora.
HIPNOSIS
Al igual que muchos abducidos Higdon dijo tener sólo un recuerdo parcial de su encuentro con el extraño ser. Recordó su bala golpeando con una barrera invisible, hablar con el extraño ser y entrar en el cubículo transparente, pero después sus recuerdos son borrosos.
Debido al éxito que el equipo había tenido en el pasado, los investigadores del ORAP sugirieron al cazador hacer una regresión hipnótica con el fin de recuperar sus recuerdos perdidos y (con suerte) saber en realidad lo que le había sucedido. Higdon estuvo de acuerdo y el 2 de noviembre de 1974, un tecnico de APRO y el profesor de Psicología de la Universidad de Wyoming, el Dr. R. Leo Sprinkle, pasaron más de cuatro horas con los Higdons y sus hijos, hablando de lo que había pasado.
Sprinkle, un hipnotizador capacitado y escéptico en el tema OVNI, había investigado miles de casos de abducciones alienígenas, fue asistido por investigadores de campo del MUFON Kenyon Rick y Nantkes Robert. Se empleó la técnica de péndulo clásico con el fin de obtener la información oculta de Higdon, pero sus esfuerzos fueron decepcionantes.
Dos semanas después, el 17 de noviembre de Sprinkle tuvo otra oportunidad para la utilización de métodos alternativos de hipnósis ... y esta vez funciono.
Bajo hipnosis, Higdon fue capaz de recordar su viaje al mundo de origen su anfitrión. Él reveló a todos los que observaban la sesión que estos seres utilizaban la Tierra como una especie de coto de caza donde venían a cazar y pescar, no muy diferentes a un grupo de "Predators".
También llevaban sus trajes negros, para protegerlos de los rayos de nuestro sol y según Higdon, la cría fue la razón por la que los seres humanos fueron llevados a ese mundo extraño. Higdon tenía la impresión de que los extraterrestres habían abducido a estos humanos, principalmente jóvenes con el fin de utilizarlos en algún tipo de programa de reproducción y que él no podía: "adaptarse a su propósito", debido al hecho de que en 1965 se había sometido a una vasectomía: " Tal vez esto es lo que querían decir cuando dijeron que no era valido.¿ Que sentido tenia que quisieran sobre todo a personas jóvenes? ".
Al final de la sesión hipnótica, se le dijo a Higdon de que iba a retener sus recuerdos del anfitrion y su expedición, pero ya no tendria miedo a los recuerdos. Más tarde Sprinkle escribiría en su informe oficial sobre el caso:
"Aunque el avistamiento de un OVNI por un único testigo muchas veces es difícil de evaluar, la evidencia indirecta apoyan la conclusión provisional de que Carl Higdon informa sinceramente de los hechos que él experimentó. Esperemos que las declaraciones posteriores de otras personas puede ser de ayuda para apoyar la declaración básica ".
LA EVIDENCIA
Las evidencias en este extraño caso son circunstanciales, no hay testigos que corroboren que vieron nada más significativo que algunas luces al azar en el cielo e incluso la célebre bala sólo demuestra que golpeó contra algo duro.
Sin embargo, hay algunos pocos elementos con respecto a este caso, que tienen desconcertados incluso a los más escépticos.
Lo primero que me viene a la mente es ¿cómo las cicatrices en el interior de los pulmones de Higdon simplemente desaparecieron sin dejar rastro?. Los investigadores afirman haberlas visto antes y después con los rayos X que parecen confirmar este proceso de curación milagrosa, que dejó a los médicos desconcertados. Si este proceso curativo no fue por el encuentro ovni, entonces ¿que podría haber sido responsable de la cura?.
El segundo factor- aunque más difícil de verificar - que da credibilidad a la versión del cazador es el estado en el que se descubrió su camión de la empresa por sus salvadores. Si los informes son ciertos entonces simplemente no hay manera de que Higdon hubiese llevado el vehículo al lugar donde fue descubierto sin la ayuda de un helicóptero militar. En cuanto a por qué su educado anfitrión lo dejaría en una zona fangosa es una cuestión de debate.
Por supuesto, siempre existe la posibilidad de que Higdon se inventara toda la historia después de haberse llevado el camión de la empresa mientras hacia novillos en el trabajo. Tal vez él supuso que sería mejor hacer una historia claramente extravagante sobre abducciones alienígenas en vez de confesar haber tenido un accidente en el bosque cuando debería haber estado trabajando. Tal vez ... pero lo dudo.
Para comenzar la llamada de su empleado que estaba enfermo antes de decidirse salir de caza. También es casi seguro que podría haberse inventado una mentira más razonable si tenía que hacerlo. Por último, ¿quién en su sano juicio se somete a un escrutinio público y el ridículo que invariablemente sigue a un informe de esta naturaleza?
Añadir a esto el hecho innegable de que Higdon era muy querido y respetado por sus vecinos, jefes y compañeros de trabajo. Por no mencionar el esfuerzo que supondría actuar delante de su esposa y el equipo de rescate en el bosque , de las enfermeras, los médicos, la policía y la prensa en el hospital y se hace evidente que o bien es uno de los más grandes actores del siglo 20 o muy probablemente la víctima de un episodio muy extraño.
CONCLUSIÓN
Entonces, ¿cómo es que un caso relacionado con un cazador solitario y su historia de un encuentro con un ser intergaláctico, se ha transformado a lo largo de las décadas en uno de los encuentros extraterrestres más conocidos del siglo XX, incluso yendo tan lejos como para ser una adaptación libre de un cómic y especialmente teniendo en cuenta cómo la mayoría de la gente la descartaría como una historia que apenas era suficiente para hacerse notar en la página tres de cualquier publicación?
Esa es una pregunta difícil de responder. Tal vez fue el trabajo duro, Higdon defendió su historia con seriedad , lo que dio algo de integridad al proceso.
El hombre del petróleo ha mantenido la veracidad de su historia a lo largo de su vida y es el primero en admitir que su viaje es una píldora difícil de tragar, incluso para él:
"Me gustaría pensar que fue sólo una pesadilla, que no era real. He tratado de dejar la mente clara de todos los pensamientos relacionados con lo ocurrido, pero, francamente, eso esta totalmente fuera de lugar en este momento".
pocos meses después de su secuestro, Higdon llegó a decir esto sobre el incidente en Forest Medicine Bow:
"Aunque sigo siendo aprensivo sobre los acontecimientos del pasado mes de octubre, creo firmemente que el público estadounidense es lo suficientemente valiente para aceptar la verdad sobre este asuntos. Por supuesto, me gustaría que todo el episodio no hubiera ocurrido, pero pasó, yo no veo ninguna razón para mantenerlo en secreto. Algunas personas pueden pensar que he soñado, pero cualquiera que me conozca puede decir que no estoy inventando nada de esto ... La gente parece aceptalo ahora. Estoy diciendo la verdad de lo pasó. Todo esto realmente pasó".
 
Fuente: